​​MEDICAMENTOS VENCIDOS O SIN USO:

​

las medicinas vencidas representan un riesgo para la salud y el medio ambiente, pues pierden sus efectos terapéuticos y se convierten en sustancias tóxicas, ya que independientemente de los empaques y envases, el principio activo puede tener características corrosivas, reactivas, inflamables y hasta radioactivas. Mientras que tirar los medicamentos a la basura, puede provocar diferentes efectos, como la contaminación del agua con las sustancias tóxicas, la muerte de microorganismos claves para el ecosistema como bacterias y microalgas que habitan en lagos y lagunas y la acumulación en tejidos de los seres vivos, como en la carne de los peces. También la generación de resistencia bacteriana por la existencia de antibióticos que llegan a los mantos freáticos, la liberación de sustancias tóxicas cuando son quemados en forma inapropiada y la posibilidad de que esos medicamentos terminen vendiéndose en el mercado.